Nací en Valencia en 1939. Aún añoro el olor de mi tierra en aquellos años. Desde mi balcón se veía la huerta y algo más lejos el azul intenso del mar. En la primavera toda la ciudad se impregnaba de perfume de azahar.
Los días de fiesta, mis padres, que eran pintores, cogían sus bártulos de trabajo y, seguidos de sus cuatro hijos, se internaban en las huertas buscando un lugar mágico que les inspirara. Nosotras correteábamos a su alrededor o bien intentábamos dibujar un paisaje como ellos.
Mis primeros juguetes fueron los lápices de colores y los papeles. Yo me hacía los recortables, los teatritos y los cuentos. Me parece que fue entonces cuando comencé a sentir la pasión de ilustrar.
Después ingresé en la Escuela de Bellas Artes para estudiar pintura y escultura. Me casé también con un pintor y tuve dos hijas, que también son ilustradoras. Cuando descubrí el maravilloso mundo de las marionetas, me dediqué con ilusión a construirlas. Hice muchas. la más conocidas son las de "El retablo de Maese Pedro" de Falla que montó televisión hace años.
Me gusta mucho mi trabajo de ilustradora porque me permite comunicar a los niños mi pasión por el arte. Últimamente me gusta escribir mis propios cuentos, como en este libro. No sé si lo hago bien o mal, pero intento transmitir esta magia en la que creo profundamente. Viví Escribá
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| Madrid |
Gloria Fuertes (1917 - 1998)
Escritora de narrativa, poesía, teatro y prolífica autora de literatura infantil y juvenil desde edad muy temprana. En los años cincuenta organizó la primera Biblioteca infantil ambulante, con la que recorría localidades donde no existían bibliotecas.
En la década de los años setenta empezó a colaborar en programas infantiles y juveniles en televisión, lo que la acercó al gran público.
Sus restos mortales descansan en el Cementerio de la Paz de Alcobendas.
Somos tan ...
Somos tan... crueles
que prefieres estar unas horas con quien quieres
que toda una vida con quien te quiere,
- o al revés-.
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| Madrid |
Almudena Grandes
Escritora madrileña heredera de la novelística del siglo XIX, gran parte de su narrativa está ambientada en los años finales del siglo XX y muestra la vida cotidiana de la España de cambio de siglo.
En su novela El corazón helado (2007) menciona la ciudad de Alcobendas y al Museo de la Ciencia que en ella se ubica:
La carretera de Burgos estaba tan atascada que, a la altura de Alcobendas, tuve tiempo para comprobar que la fachada del museo interactivo con el que colaboraba desde hacía algunos años, ya estaba libre de las banderolas anaranjadas que habían anunciado durante un trimestre la exposición sobre Marte...
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| Magdalenas caseras |
