Aunque Belchite es conocido por los episodios trágicos que sufrió durante la Guerra Civil, su historia se remonta, al menos, hasta el Calcolítico -Edad del Bronce (III milenio a. C), según atestigua la cueva sepulcral de "los Encantados", donde fueron enterrados "los primeros belchitanos" acompañados de ajuares consistentes en hojas de hoz, cuencos campaniformes, puñales y puntas de flecha.
Arco de la Villa
Arco o Portal de la Villa, del que arranca la calle Mayor, espina dorsal del pueblo. El arco está formado por dos plantas. La superior es una capilla dedicada a la Virgen del Portal. Se trata de una construcción barroca del siglo XVIII, muy frecuente en el Aragón de la época. Aparte de los sólidos muros y de los robustos portones, los antiguos pobladores de Belchite se protegían de esta forma, simbólicamente, de pestes y desgracias.
El territorio actual de Belchite siguió siendo habitado durante la Edad del Hierro (s. VIII - IV a.C.), como prueba a el yacimiento del "Cabezo del Moro", que perduró hasta la llegada de los romanos.
Consolidado el dominio de los romanos, a comarca conoce un importante florecimiento, ligado a la recepción del riego en sus tierras, a través de una acequia que provenía de la presa de Almonacid de la Cuba, e igualmente a su estratégica ubicación de paso. Su síntoma más visible es la ciudad de "El Pueyo" que prospera entre los siglos (I a.C - II d.C.) y tiene un importante papel en el proceso de jerarquización del poblamiento del valle del Aguasvivas.
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