Colores del mundo

 

Cada día estamos rodeados por un caleidoscopio de vida en color en constante cambio. Desde los suaves tonos pastel de una puesta de sol hasta las luces brillantes de una bulliciosa ciudad, el color nos envuelve a todos. Es una fuerza que nos mueve y nos motiva, nos relaja y nos tranquiliza, y nos excita y nos cautiva.

 

Tanto si invade todo un ambiente como si se reduce a un pequeño punto aislado de brillo en un mar de negrura, el color es siempre un personaje principal en la fotografía. Actúa como un mensajero para todos nosotros.

 

 

Una mínima diferencia en la longitud de una honda luminosa determina si vemos el color rojo o el azul, y la psique humana da a esos colores connotaciones que se han generalizado en las culturas de todo el mundo. En India y en Japón, el rojo significa pureza, en África se considera el color del luto y en otros países tiene una connotación de potencia y fuerza.

 

En las sociedades en que vivimos expuestos a una avalancha constante de colores en la publicidad, la ropa y la tecnología, estas fotografías nos permiten dar un paso atrás y descubrir la importancia y el significado del color en nuestro mundo.

 

 

Cristina Mittermeier. Antártida, 2017

El amarillo es un color llamativo cuando lo vemos en la breve aparición de un abejorro rayado o en el brillo luminoso de los peces cirujanos amarillos que entran y salen a toda velocidad en un arrecife de coral luminiscente. El amarillo es el sol que da luz al planeta y nos proporciona crecimiento, calor y relajación. El amarillo puede ser el reflejo de una enorme estatua de Buda que te contempla serenamente desde arriba en su esplendor dorado. El amarillo es sereno en los vastos campos de trigo resplandeciente que se extienden a lo largo de interminables llanuras.

Mosaicos de colores decoran las paredes de la Mezquita de los Viernes. Herat, Afganistán (1972). Thomas J. Abercrombie

El blanco está en todos los principios y los finales. Es un color etéreo, es inmaculado y prístino. La delicadeza del blanco se puede ver en las plumas suaves y blandas de una garceta nívea o en la fina membrana de un huevo de cisne.

Si bien puede parecer que el blanco es la nada absoluta, en realidad es la presencia de todos los colores combinados en una tonalidad cegadoramente brillante. El blanco es la suma de todos los colores. Es el color de la nada y del todo.

El azul, en nuestro planeta vivimos constantemente rodeados por diferentes matices de azul. Desde tiempos inmemoriales, el color azul ha estado profundamente arraigado en la cultura humana, que tanto lo puede relacionar con una profunda melancolía como con una melancolía como con una serena esperanza. Recientemente, la ciencia moderna ha permitido a los astronautas alejarse lo bastante en sus viajes como para contemplar la Tierra desde el espacio y verla como lo que realmente es: un planeta azul.

Centro de Arte de Alcobendas

Liz, Valentina y María Jesús