domingo, 2 de julio de 2023

Mezquita - Catedral de Córdoba

Puente Romano y Torre de Calahorra

 

"[...] desde el primer momento comprendí
que estábamos vinculados,
que algo infinitamente perdido y distante 
seguía sin embargo uniéndonos."
 
                                                              -Julio Cortazar-


El Comité del Patrimonio Mundial de la Unesco ha declarado el Centro Histórico de Córdoba como Patrimonio Cultural de la Humanidad, en su sesión del día 17 de diciembre de 1994.


Virgen de los Faroles



 
No ha quedado en España de nosotros
De nuestros ocho siglos
Sino la hez del vino
En el cuenco del vaso...
Tan solo de Granada y
De los Banúl-I-Ahmar
Lo que narran los cuentos,
ese Dios es el solo triunfador
Por todos los rincones
Solo queda su alcázar,
Como Venus desnuda
Que aún sigue viendo
De una historia de amor periclitada.
                                                    Notas andaluzas
                                                                  Nizár Qabbání
 




En las ciudades saladas,
temerosas, enmarañadas,
los enamorados sienten
vergüenza y bajeza.
En cambio a mí, cuando
amo a una mujer,
me sacude el temblor de una flor.
                                                       
                                                                Nizár Qabbání
 
 

 




El amor, cariño mio,
es un bello poema escrito en la luna.
El amor está pintado en todas
las hojas de todos los árboles,
el amor está grabado
en las plumas de los pájaros y 
en las gotas de lluvia.
Pero, a cualquier mujer en mi país
cuando ama a un hombre
la arrojan cincuenta piedras.
                                                Nizár Qabbàní
 
 
 
 



¿Dónde ocultarte, amor mío?
Si somos dos bosques que arden,
y todas las cámaras de televisión están fijas en nosotros.
¿dónde esconderte, amor mío?
Si todos los periodistas quieren convertirme
en la estrella de las portadas,
y a mí en un héroe griego
y en un escándalo gráfico.
                  
                                             Nizár Qabbání
                                                
 
 
Dame una hija con tu corazón obstinado,
o tu temperamento ecuánime.
Dale a nuestros hijos tus ojos oscuros y brillantes,
o tu sonrisa encantada. 
Para que incluso cuando nos hayamos ido,
el mundo encuentre en ellos todas
las razones por las que te amé.
                                                      Nizár Qabbání
                                         



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