jueves, 27 de noviembre de 2014

Parque del Manzanares. Madrid



Obra: Parque del Manzanares           Cliente: Ayuntamiento de Madrid
Arquitectos: Ginés Garrido (director) Burgos & Garrido /Porras La Casta / Rubio & Álvarez-Sala (MRIO) + WST8.
Consultores: TYPSA (ingeniería); Fhcor, Cesma (gestión de obras); NB 35 (estructuras); Richter Spielgeräte / BDU (zonas de juegos); Tecnoma (ingeniería ambiental); ALS (iluminación); Fundación Conde Valle Salazar (edafología); SC Paisajismo y Fundación CVS (botánica); Dpto. Ideación Gráfica Futura (diseño gráfico).






Espacio público, espacio ciudadano

(...)El proyecto auspiciado por un concurso convocado en 2005 -ganado por el equipo liderado por el estudio madrileño Burgos & garrido-, es necesario, celebrar positivamente la incorporación al paisaje urbano de Madrid de una nueva pieza de gran entidad, este gran parque, en cuya calidad como obra construida persiste y se evidencia la inicial e inteligente lectura del territorio y de la geografía madrileña contenida en la propuesta ganadora, así como el acierto de sus autores sobre cuáles debían ser finalidad, los materiales y el carácter del parque.(...)
 


Monumento explicando la evolución histórica del Puente del Rey y su entorno.
 
 El árbol primero

Hay que destacar que en este nuevo parque la materia prima es el árbol, enmarcado en un potente tratamiento del suelo que sirve como asiento sin pretender ser protagonista por encima de la arquitectura forestal. Éste, sin duda, es un valor a destacar cuando proliferan los llamados "parques" en los que el acero corten, los puentes levadizos, las luminarias y el hormigón lo invaden todo, apabullando, cuando no anulando, la condición del espacio arbolado, esencia última de un parque.
 
Túnel de Bonaparte (1811 - 2011)

Una de las grandes aportaciones del proyecto es, en este sentido,  el paseo de pinos que, en la margen derecha, recorre el parque lineal en toda su longitud, guiando, articulando y sombreando sendas, plazoletas, zonas de reposo o los novedosos y atractivos juegos infantiles. El diseño de esta senda arbolada y lineal merecen destacarse los criterios de plantación con los que se han seleccionado las especies, con tamaños, configuraciones y variedades diferenciadas pensadas para que, una vez trasplantadas, evoquen el pinar de origen, evitando así la pobreza inicial que se manifiesta en la monotonía y raquítica estatura de una plantación traída de un vivero, apostando, por el contrario, en sus deformaciones y espontaneidad naturales, por la imagen de un pinar mediterráneo cuyas raíces, antes ancladas en la roca, se posasen ahora sobre el hormigón de su nuevo hábitat.

Por su parte, en la margen izquierda, frente a la inevitable sequedad del pinar, domina el paisaje del arbolado de ribera, que puebla y configura, con trazados más complejos y entrelazados, las explanadas y las zonas de agua (láminas perforadas a veces por un conjunto de surtidores). Este paisaje se realza, en ciertos lugares, mediante una topografía artificial voluntariamente inventada o que sirve de camuflaje de los bultos de fábrica que emergen, como jorobas, del gran túnel enterrado. En el conjunto del parque, el recurso a distintas especies evita una plantación aleatoria para apostar por la construcción de masas homogéneas que dialogan desde cierta distancia y autonomía, configurando una verdadera arquitectura vegetal y no un simple muestrario de plantas, que nos permite remitirnos a los dibujos de Le Corbusier.
 

Y la huerta...Toda la obra ha querido apoyarse en la geografía, en la topografía, sea esta natural o forzada por las obras de soterramiento, pero al mismo tiempo ha buscado con inteligencia, evitando mimetismos estilísticos, algunas trazas históricas que enriqueciesen el nuevo paisaje y dieran apoyo a trazados más cultos, como es el caso de la reinvención de la Huerta de la Partida, cuya geometría se recupera, configurando un paisaje de pequeña escala, extenso y transparente, al que se añade un arroyo Meaques de diseño y una nueva senda pavimentada que marca un eje y sirve de enlace visual entre la vieja huerta histórica y el Palacio Real. Una plataforma mirador, en el extremo más alejado de este eje, afirma el carácter de esta huerta, cercada con su tapia y puertas tal como se han definido y defendido tradicionalmente estos trozos de tierra fértil y jugosa en la seca meseta castellana.
 
La obra civil. El suelo

Contenciones pretiles, albardillas y encintados constituyen las formas y materiales con los que se define y materializa la "obra civil" de este parque. Los cortes topográficos y, de forma destacada, el salto de cota desde el nivel en que se desarrolla el paseo de pinos y lo que queda de la plataforma fluvial y el propio río, se definen -con rigor geométrico y contundencia volumétrica- mediante un muro de contención cuyo paramento visto es tratado con un aplacado de costeros de granito, dispuesto como los pliegues de una cortina que a veces juega cambiando el ritmo repetido por otro basado en la serie de Fibonacci. Se trata de un gran acierto que se alterna con la solución constructiva de los pretiles, más que antepechos, que se configuran como elementos de protección frente a las caídas, confiando su eficacia más a su anchura que a su altura, pudiendo esta última oscilar entre cincuenta centímetros y un metro. En ambos casos se apuesta por la solidez: unas veces, cuando la diferencia de alturas es pequeña, mediante unas grandes piezas de granito a las que basta añadir un ligero respaldo para transformarlas en largos bancos; otras construyendo un muro pétreo compuesto y rematado por una gran albardilla, solución esta última que evoca el magnífico borde de mar en la Plaza del Tenis, de Peña Ganchegui, en San Sebastián, a la que tanto debe el Peine de los Vientos de Chillida.

Puente del Rey

Avda. de Portugal

Los caminos de asfalto, de terrizo o solados a la portuguesa están delimitados por un encintado granítico de gran anchura y bajo resalte cuya talla ligeramente convexa en su cara superior añade a la solución la especial delicadeza y atractivo estético que no podría ofrecer un simple paralepípedo pétreo de regulares dimensiones. También el acabado de los propios pavimentos -asfalto coloreado, terrizo compacto y el infinito pequeño adoquín a la portuguesa- se adecúan a las distintas funciones  o usos, evitando convertirse en un mero muestrario, aunque matizando las distintas zonas de actuación.

Puente oblicúo 
 

Puentes y pasarelas

En el afán de que este parque sirviese para coser visual y funcionalmente las dos márgenes del río ya encauzado, los puentes o las pasarelas peatonales eran reclamados desde el principio como elementos imprescindibles en la configuración de este nuevo espacio urbano. Un primer acierto ha sido la reutilización y renovación de los pasos ya existentes. los puentes históricos del Rey y de Toledo, las compuertas construidas en la canalización del Manzanares, incluso ese cauce sesgado correspondiente a una calzada residual de la antigua M-30, que se ha dulcificado he incorporado paisajísticamente al nuevo parque con el añadido de un túmulo de tierra y vegetación y  una delgada barandilla, construida con perfiles normalizados, que se inclina hacia el transeúnte evitando la dureza que podría provocar una convencional verticalidad.

  Puente en Y

Pasarelas cáscara

Junto a la renovación de las conexiones preexistentes, habría que añadir los nuevos saltos del río, (...) tres pasarelas, seguramente las más novedosas. La primera, que se concibe como un homenaje a Eiffel, merece un rotundo aplauso por su honestidad formal y constructiva. La segunda, una cáscara de hormigón en forma de arco del que cuelga el paso peatonal, cóncavo, que se decora a lo medieval o renacentista, resulta más artificiosa. Lo que es difícil de justificar es, sin embargo, el puente proyectado por Dominique Perrault, tan pretencioso en su barullo compositivo, abarrotado de formas y detalles constructivos que anulan, ocultan y desvirtúan lo que pudo ser la apuesta sincera por una estructura tubular como elemento consistente capaz de cubrir un gran vano.

 Pieza tubular proyectada por Perrault.



Buscando el borde de la ciudad

Uno de los grandes méritos de esta intervención, aunque sea menos visible, es su generosidad en el tratamiento del espacio urbano, sobrepasando los estrictos límites del ámbito de actuación propios del parque, para desbordarlo y extender sus materiales 8árboles, pavimentos, mobiliario, etc...) hasta el pie mismo de las edificaciones vecinas, dignificando así las aceras y bocacalles. (...)
                                                                                            Eduardo Mangada
                                                                                                                          (Arquitectura Viva)



domingo, 16 de noviembre de 2014

El teleférico de Madrid

 
 
Templo egipcio de Debod
 
 
 

Paseo del Pintor Rosales está situado entre las calles de Ferraz y el Paseo de Moret. Lleva este nombre en recuerdo del pintor madrileño Eduardo Rosales (1836-1873), dedicado sobre todo a la pintura histórica, entre cuyas obras destaca El testamento de Isabel la Católica.


Monumento a la infanta Doña Isabel de Borbón, hija de la reina Isabel II y conocida popularmente como "la Chata". Inaugurado en 1955.(Paseo del pintor Rosales).


Teleférico de Madrid Rosales - Casa de Campo.
Inauguración 26 / 06 / 1969.

Longitud 2457 metros.
El alboroto que organizamos es de recreo en escuela infantil, somos un peligro.
 

Cotas sobre el nivel del mar... Estación motora 627 metros. Estación tensora 651 metros.
Altura máxima sobre el suelo 40 metros.

Capacidad 1200 personas en cada destino.

 
Velocidad 3,5 metros / segundo. 
El sol deslumbra, crea reflejos en el cristal , las fotografías pierden color.

 
Duración del trayecto 11 minutos.
Leonardo Torres Quevedo, el Edison español, (Cantabria  28 de diciembre de 1852- Madrid 18 de diciembre de 1936),este ingeniero de caminos es el inventor del teleférico.


Lope de Vega dijo del río Manzanares en una seguidilla:

"Río pequeño
que por no tener agua
corre con fuego".

*********

"Tenéis una hermosa puente
con esperanzas de río".
                                                               A. Nuñez de Castro


Escribir en Madrid es llorar, es buscar voz sin encontrarla, como en una pesadilla abrumadora y violenta.
                                                                           (Mariano José de Larra)


La Casa de Campo es el mayor parque público de Madrid, situado al oeste de la capital. Fue propiedad histórica de la Corona Española y coto de caza de la realeza. Tras la proclamación de la Segunda República, fue cedida por el Estado a la ciudad de Madrid estando desde entonces abierta al público (1/5/31).
 
Madrid es tener un gabán que abriga mucho y con el que se puede ir tranquilo hasta a los entierros con relente. Madrid es quedarse alegre sin dinero y no saber cómo se pudo comprar lo que se tiene en casa.Ramón Gómez de la serna
                                                                                                 
La vegetación actual del parque está formada por manchas de diferentes formaciones vegetales donde destacan los encinares, pinares de pino piñonero, retamales, praderas seminaturales, repoblaciones de coníferas y arboledas de ribera ceñidas a las vaguadas por donde circulan los arroyos.

Madrid yace envuelto en sueño, todo al silencio convida.
                                                                          José de Espronceda  
     
El paisaje que se percibe desde la Casa de Campo es uno de los más  singulares que podemos contemplar.
 
Desde las cimas de algunos cerros, como el cerro Garabítas o el de las Canteras, se divisa casi la totalidad del Parque con su mezcla de colores de tonos verdosos; verde claro en los arroyos, verde oscuro en las zonas dominadas por las  por el encinar, verde intenso en las zonas con pinares, amarillo pajizo en los prados y verdes azulados claro-oscuros en las zonas repobladas con coníferas
La vegetación constituye el elemento más aparente del paisaje de la Casa de Campo. 
 
Su diversidad de formas y lo cambiante de  de su aspecto durante las diferentes estaciones del año imprimen un dinamismo peculiar que da vida y rompe la monotonía del conjunto en el Parque. 

La extensión de la Casa de Campo ha conocido altibajos, a lo largo del tiempo, como casi todos los parques madrileños. En la actualidad posee una superficie superior a las 1.700 hectáreas, contando con las ocupadas por el Club de Campo, situado al noroeste, al otro lado  de la carretera de Castilla.
 
Llegamos al otro lado



Las vistas desde la terraza son magnificas.


Parece que hoy toca hablar de Madrid. Madrid es una gran ciudad, o por lo menos una ciudad grande.F. Umbral
                                                                                 
Sólo te nutre tu vivida esencia. Duermes al borde del hoyo y la espada. Eres mi casa, Madrid:mi existencia, ¡Qué atravesada! M. Hernández
                             

La lista de fauna vertebrada en la Casa de campo es muy rica pues se han citado 133 especies distintas. 
 

En este libro quiero dejar en pie al Madrid eterno, lo bueno y bello de antes y de hoy...Y un poco lo de mañana.J.R.Jiménez
                                                                

A Carmen se le ha caído el móvil por una de las ventanas de la cabina. Horror!
 

Está desolada, tenemos que volver y buscarlo "una aguja en un pajar".

Pilar cambia imposible por "difícil pero, puede hacerse".


Pilar, que en ese momento grababa, tiene localizado el lugar.

Daremos la vuelta y emprenderemos la  Búsqueda del móvil caído.

  Tomada la decisión disfrutamos del paisaje ¿qué más podemos hacer?


Yo salí de Granada, y vine a ver, la gran villa de Madrid, esta nueva Babilonia,  donde verás confundir en variedades y lenguas el ingenio más sutil.P. Calderon de la Barca.                                                            
¡Por fin llegamos!


Ya estamos de vuelta y preguntándonos si conseguiremos encontrar el móvil.
 

Y llega el "milagro" 

Pilar encuentra el móvil, con ayuda de San Cucufato, al que Carmen retó.


Carmen no podía más con los tacones, estamos agotadas y felices, las tres lo hemos conseguido. Prueba superada
 

Carmen ha recuperado el móvil en perfecto estado, increíble. 

Hay que continuar caminando, charlando y riendo.

A mí Madrid me da miedo, porque si Valladolid me parece ya un enorme aparcamiento, Madrid me parece cinco veces ese aparcamiento.M. Delibes
 



El Lago de la Casa de Campo es una extensión de agua ubicada en el parque. Originalmente eran cinco estanques interconectados y construidos en el año 1563 por el holandés Pierre Jasen y surtidos por el arroyo Meaques, dado a las lluvias los estanques se reunían en uno sólo.

Fue en el siglo XIX cuando se forma el Estanque Grande que da lugar al actual Lago de la Casa de Campo, una zona ideal para  practicar el piragüismo y el triatión, además de poseer una zona de embarcadero.
 

En su interior la Casa de Campo ofrece diversas instalaciones, como el Parque de Atracciones, el Zoológico, el Teleférico (que conecta la Casa de Campo con el Parque del Oeste, al otro lado del río Manzanares), recintos feriales, el pabellón multiusos Madrid Arena, la Venta de Batán (lugar tradicional de encierro de los toros en los días previos a su lidia en la Plaza de las Ventas) y diferentes instalaciones deportivas.

En Madrid, jamás llegué a pisar la calle, porque cada vez que aparecía en la puerta del Hotel Ritz, una legión de caballeros arrojaban sus capas al suelo para que caminara sobre ellas, poniendo ante mi una alfombra que nunca se acababa.Mata Hari
                                    
La vida fluye incesable  y uniforme; duermo, trabajo, discurro por Madrid, hojeo al azar un libro nuevo, escribo bien o mal -seguramente mal- con fervor o con desmayo. De rato en  rato me tumbo en un diván y contemplo el cielo, añil y ceniza. ¿Y por qué había de saltar de improviso el evento impensado?  (Azorín)

 

En llamas, en otoños incendiados,
arde a veces mi corazón, puro y solo.


El viento lo despierta,
toca su centro y lo suspende
en luz que sonríe para nadie:
¡cuánta belleza suelta!


*****

Busco unas manos,
una presencia, un cuerpo,
lo que rompe los muros

  *****

y hace nacer las formas embriagadas,
un roce, un son, un giro, un ala apenas;
busco dentro de mí,



huesos, violines intocados,
vértebras delicadas y sombrías,
labios que sueñan labios,
manos que sueñan pájaros...
                                              Octavio Paz
                                                          


Que fuerza la de este rojo y los reflejos del agua como contraste.

Nos gusta el embarcadero

Adiós a la Casa de Campo, por hoy.